Por Nancy Rodríguez
Reprocha una de las reporteras “Que no le dan ganas de ir al baño al presidente, ¡que bárbaro!, ya me andaba”.
Así, al término de la conferencia, tempranera, del presidente Andrés Manuel López Obrador, en Palacio Nacional.
El Presidente de México es un hombre entero, sonriente, feliz saluda a los medios de comunicación. Ofrece una síntesis de su reunión con el Gabinete de Seguridad y pide inicie la conferencia de prensa.
El primer mandatario nos observa; de izquierda a derecha, al centro, adelante y atrás.
Contesta una a una de las preguntas de los medios.
Se siente cómodo, no le preocupa el tiempo que se lleve al frente del micrófono, bueno, ni se cansa de estar parado por más de una hora; para ser exactos una hora diez minutos la que duro esta mañana de lunes 10
A penas lleva una semana y la agenda la encabeza invariablemente.
Dicta tema, del día
Abre la discusión en Redes Sociales y medios tradicionales
Los seguidores en Periscope de twiter, Facebook y youtube, cada día crecen más.
Además, después de la Conferencia de prensa tuvo ésta agenda por el resto del día:
A las 10:00 horas se reunió con la secretaria del Trabajo y Previsión Social.
A las 11:30 horas, con las titulares de Semarnat y Conagua.
A las 13:00 horas recibió al secretario de Turismo.
A las 16:00 horas recibió a la titular de la Secretaría de Economía.
A las 17:00 horas se reunió con el secretario de Hacienda y Crédito Público.
A las 18:00 horas encabezó la ceremonia de entrega del Premio Nacional de Derechos Humanos 2018. en el Salón “Tesorería” de Palacio Nacional.
Así, arranca un nuevo sexenio.
Un nuevo presidente.
Una nueva forma de gobernar.
Hay mucho Andrés Manuel por delante.
Y, atrás de él, todos.
Es una realidad; que nadie puede negar.